“Mientras creamos que alguien más tiene el poder de hacernos felices, estaremos poniéndonos a nosotros mismos como víctimas”.

Uno de los problemas más grandes con las relaciones en esta sociedad, es que el contexto con el que las abordamos, es demasiado pequeño.

Se nos enseñó, que la meta es tener la relación.

Esto comienza en la niñez temprana con los Cuentos de Hadas sobre el Príncipe y la Princesa que vivieron felices para siempre. Continúa en películas y libros en donde “El chico encuentra a la chica” “El chico pierde a la chica” “El chico recupera a la chica”, la música se hace más fuerte y la feliz pareja, parte en el atardecer. Las canciones que dicen “No puedo sonreír sin ti”, “No puedo vivir sin ti” “Tú eres mi todo”, describen el tipo de amor que hemos aprendido conforme crecimos, amor tóxico, una adicción con la otra persona, como nuestra droga por conveniencia, como nuestro Poder Superior.

En el momento en que consideramos a otro ser humano como nuestro Poder Superior, vamos a enfrentar la experiencia de fracaso en lo que sea que estemos tratando de lograr.

Terminaremos sintiéndonos victimizados  por la otra persona o por nosotros mismos y aún cuando nos sintamos victimizados por la otra persona, nos reprocharemos por las elecciones que hicimos.

Estamos programados para fracasar en la satisfacción de nuestras necesidades en las Relaciones Románticas, debido al sistema de creencias que se nos enseñó en la niñez y los mensajes que obtuvimos de nuestra sociedad, al ir creciendo.

No existe una meta para alcanzar, que nos lleve a “Vivir felices para siempre”. No estamos incompletos hasta que encontramos a nuestra pareja del alma. No somos mitades que no puedan completarse, sin una relación.

El amor verdadero, no es una obsesión dolorosa.

No es tomar un rehén o ser un rehén.

No es algo que consume totalmente, que aísla o constriñe.

Creer que no podemos estar completos o ser felices sin una relación, no es sano y nos conduce a aceptar la privación y el abuso y nos engancha en la manipulación, la deshonestidad y las luchas de poder.

El tipo de amor que aprendimos cuando crecimos, es una adicción, una forma de amor tóxico.

Aquí hay una pequeña lista de las características del amor contra el amor tóxico (compiladas con la ayuda del trabajo de Melody Beattie & Terence Gorski.)

AMOR AMOR TÓXICO
1 Desarrollo del ser como  prioridad. Obsesión con la relación.
2 Espacio para crecer, expandirse; deseo de que el otro crezca. Seguridad, comodidad en la similitud; intensidad de la necesidad, vista como una prueba de amor (que puede ser realmente miedo, inseguridad, soledad).
3 Intereses separados; otros amigos; mantener otras relaciones significativas. Involucrados totalmente; vida social limitada; negación de viejos amigos e intereses.
4 Alentarse mutuamente a expandirse; seguridad en la valía propia. Preocupación por el comportamiento del otro; miedo a que el otro cambie.
5 Confianza apropiada (por ejemplo confiar que la pareja se comporte, de acuerdo a su naturaleza fundamental). Posesión; miedo a la competencia; protege “su inventario”.
6 Compromiso, negociación o tomar turnos para ser el líder. Resolución de problemas en conjunto. El poder juega por el control; reproches; manipulación pasiva o agresiva.
7 Abrazar mutuamente la individualidad del otro. Tratar de cambiar al otro a nuestra imagen.
8 La relación se enfrenta con todos los aspectos de la realidad. La relación está basada en una falsa ilusión y en la evasión de lo que no es placentero.
9 Ambos se cuidan a sí mismos; el estado emocional no depende del otro. Expectativa de que uno arregle o rescate al otro.
10 Desapego amoroso (preocupación sana por el otro, mientras lo dejas ir)- Fusión (estar obsesionado con los problemas y sentimientos del otro).
11 El sexo, es una elección libre que crece desde el cuidado y la amistad. Presión sobre el sexo debido a la inseguridad, miedo y la necesidad de gratificación instantánea.
12 Habilidad para disfrutar en soledad. Incapaz de soportar la separación; estar pegados.
13 Ciclo de comodidad y contento. Ciclo de dolor y desesperación.

 

El amor no debe ser doloroso. Hay dolor involucrado en cualquier relación, pero si es doloroso la mayor parte del tiempo, entonces algo no está funcionando.

No hay nada malo con desear una relación, es natural y saludable. No hay nada malo con querer una relación que dure para siempre – tener la expectativa de que dure para siempre es lo que es disfuncional. Las expectativas nos colocan en el papel de la víctima – y provocan que nos abandonemos a nosotros mismos en la búsqueda de nuestra meta.

Si podemos comenzar a ver las relaciones, no como metas, sino como oportunidades para crecer, entonces podemos comenzar a tener relaciones más funcionales. Una relación que termina, no es un fracaso o un castigo, es una lección.

Mientras nuestra definición de una relación exitosa sea que dure por siempre – estamos predestinados a fracasar. Siempre que creamos que debemos tener al otro en nuestra vida para ser felices, somos realmente sólo un adicto, tratando de proteger nuestro inventario – usando a otra persona como nuestra droga de conveniencia. Ese no es Verdadero Amor – Ni es Amoroso.

Robert Burney,

autor de “Codependence: The Dance of Wounded Souls” (“Codependiencia, la Danza de las Almas Heridas”)

 

Queremos recordarte, que cuentas con nosotros si deseas la transformación de tu vida y ser parte del cambio global que esta sucediendo.

Te gustaría…

¿Sanar el pasado y vivir el presente, con más plenitud y disfrute?

¿Recuperar la energía natural y espontánea de cuando eras niño?

¿Desactivar los obstáculos que limitan el DISFRUTE en tu vida?

¿Cambiar las actitudes que limitan la armonía en tus relaciones?

 

Sigue este enlace…

http://brev.is/mGQ5

 

¡El cambio es posible!

Por un nuevo paradigma en nuestras relaciones…

 

En conciencia y sanación.

 

Luis Díaz

CMR

 

informacion@cellularmemory.org

 

Si quieres conocer mas del tema puedes unirte a nuestra comunidad SerReal y puedes invitar tambien a tus amigos.

Encuentranos en facebook.